El árbol navideño visto desde los ojos de un niño humilde, significa la esperanza de que esta navidad llegue hasta su hogar la alegría y la tranquilidad de disfrutar momentos junto a su familia, dejando de lado la necesidad de que la opulencia o la algarabía se represente en grandes festines. Sin dejar a un lado los sueños de un niño trabajador, esta Navidad no será diferente.
La foto fue tomada en la noche y sus tonos oscuros contrastan con la luz del árbol navideño y el velo de misterio en la expresión del niño.
El consumismo equivocadamente nos invita a disfrutar de una Navidad llena de juguetes, confites, y demás algarabía; dejando de lado el verdadero sentido de la Navidad y creando en los pequeños de la casa la errónea concepción de que la Navidad, existe solo si hay regalos.
La foto refleja la alegría y el colorido de la Navidad, el deseo expresado en el rostro del niño denota la curiosidad de los infantes.
La empresa privada en el afán de comercializar sus productos, ven a esta época como una nueva oportunidad de incrementar sus ganancias y liquidar los productos que por distintos motivos no han sido vendidos a lo largo del año.
Nuevamente el mercantilismo ha ganado terreno, y con una tradición que lleva más de 2000 años, incrementarán ellos sus carteras mientras que los consumidores aumentarán sus deudas para el nuevo año.
La foto es tomada en una consesionaria de autos donde encontramos un pesebre de gran tamaño junto a un hermoso árbol de Navidad.
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